¿Qué podemos conocer sobre los celtas? ¿Eran un aluvión de cortadores de cabezas, o seres bucólicos que vivían en armonía con la naturaleza? ¿Por qué no construyeron un imperio si llegaron a habitar desde Grecia hasta las islas Británicas? Los celtas no dejaron historia escrita y su tradición era netamente oral. Solamente podemos basarnos en fuentes romanas, de las cuales la principal es la Guerra de las Galias de Julio Cesar. ¿Son estas suficientes? ¿Es fiable la versión del vencedor?
El presente trabajo intenta demostrar, a través de las dos vertientes más importantes que poseemos: las epopeyas, compiladas por los monjes irlandeses del siglo VIII, y el mundo feérico, articulado por la tradición folklórica, que la cultura celta es mucho más que un conjunto de prácticas mágicas dominadas por los druidas. Esa cultura, que hoy suele ser idealizada, o curiosamente adaptada a una visión new age, posee en realidad una estructura mítica tan importante como la grecorromana, aunque mucho menos conocida.
Y es este aspecto el que escoge Viviana Campos para abordar su trabajo. De allí en mas, se atiene a las pocas fuentes ciertas, menciona las dudosas y señala las evidentes deformaciones históricas. Mitología, historia y folklore, mas que sospechosas cronologías. Esta opción, según la autora, brindará al lector una percepción cabal de esa cultura que irrumpió semidesnuda en Europa hace miles de años, que ha dejado profundas huellas en el bagaje cultural y literario de Occidente, al tiempo que una recurrente pregunta: ¿quiénes fueron los celtas?