La Programación Neuro´Lingüística, PNL, ya ha adquirido respetabilidad. Esta disciplina, que inició a comienzos de la década de los ´70 del siglo XX en la Universidad de Santa Cruz, California, recinto de Palo Alto, debido a la curiosidad y capacidad de percibir patrones de conducta del entonces estudiante de Matemáticas y Programación, Richard Bandler, y la agudeza verbal de John Grinder, profesor de dicha universidad para la época, hoy es aceptada como una vía eficiente de inducir el cambio personal y la influencia.
Mi encuentro con la PNL se originó en la década del ´90 a través del brillante libro de Anthony Robbins Poder sin límites. Considero, luego de leer tantos libros sobre la PNL, que Poder sin límites sigue siendo, por su excelente combinación de motivación, técnicas de PNL y enfoque positivo, la mejor introducción que conozco a esta disciplina.
A mí, particularmente, desde que la conocí me apasionó. Por primera vez veía que era posible encontrar un camino para modelar las conductas de éxito, para reproducirlas, para centrarnos en el cómo y alcanzar la excelencia a nivel personal.