A Quien Le Toque

Comienza con Bertha Cool, quien está bastante molesta. El distinguido Homer Breckinridge había estado esperando durante veinte minutos a que apareciera Donald Lam. Alrededor del Sr. Breckinridge, se podía percibir el aroma embriagador del dinero. Luego llegó Donald, y en menos tiempo del que tarda un gallo en cantar, fue contratado para investigar una reclamación de seguro.